lunes, 21 de noviembre de 2011

V Travesia Marismas del Odiel 2011



Un año más estábamos allí, algunos casi nos quedamos sin dorsal, se ve que la gente por ser una carrera gratuita se apunta sin más, y muchos se quedan fuera, aunque la organización hizo un esfuerzo y amplió el número de participantes… Al final corrimos los mismos de siempre, a los que ni aguaceros, ni tormentas, ni el fresquito, ni el viento, ni un fangal de 16 Km. pueden dejar sin calzarse unas zapatillas y correr, correr sin más.
Marismas del Odiel ya esta marcado en rojo para más de uno de nosotros, es una de esas carreras que no se pierden en la memoria, ¿quién lo iba a decir hace 5 años cuando se comenzó esta historia?, cada año más participantes, cada año un nuevo reto para la organización, y sorprendentemente cada año un nuevo reto para los corredores, cosa difícil que tenga una carrera, por que nunca es igual, por que siempre parece transformarse, parece brindarnos la oportunidad de superarnos, de ampliar nuestros retos, como comentaba esta misma mañana, es camaleónica…
Para no dejar de acompañarnos allí estaba la lluvia, había sido incesante durante toda la noche, nos daba pequeñas treguas durante la mañana, desde que cojo el dorsal hasta que me coloco y me preparo, desde que me preparo hasta que caliento un poco bajo el arco de salida, pero desde que sonó el disparo de salida fue cruel con nosotros, fue una ducha hasta el Km. 2 antes de adentrarnos en el fangal de los caminos entre salinas.
Resultaba difícil correr, a mi nunca me resulta fácil ;), pero más aún no con los pies atrapados en el fango en algunas ocasiones, alguna que otra piscina, salto inútiles, pero como siempre digo, un disfrute, estaba allí corriendo, y eso, siempre es una alegría. Me tiré prácticamente toda la carrera en solitario, me pegaba a gente que alcanzaba e intentaba charlar…ya que a Ángeles la dejé casi al principio, en el Km. 3 cuando tuvo que pararse por que se le había desatado los cordones. A mitad de carrera se me fastidió el gemelo izquierdo, al parecer algo habitual cuando hay fango, ya que a veces el pie se desliza hacia atrás bruscamente. Los dos últimos Km. se me hicieron eternos pero el paisaje era espectacular, las nubes amenazantes que se reflejaban en el agua en calma, el sol intentando salir, y la meta cada vez más cerca…y Antonio (mi presi) que apareció para animar, y se quedó esperando a Ángeles, para hacerle de liebre (ya lo es, hizo 01:12:00).
En la meta lo mismo de siempre, el olor de la garbanzo, ¡dios que hambre tenía¡ y que buenos estaban. Nos lavamos un poco en una fuente, hicimos un poco de nudismo en los aparcamientos, a más de uno le gustó la escena, y a compartir un rato con los compañeros, con Román, con Jaime que se estrenaba, con Antonio, etc.… un bonito día, aunque para algunos fuéramos solo unos locos, unos locos que corren.
Algunas fotos del agua, barro y lluvia, una combinación estupenda.












Un video de unos compañeros del C.D. Jartibles de Sevilla:

2 comentarios:

Celina dijo...

Enhorabuena! menudo reto para tod@s los corredores con el terreno tan embarrado! me alegra mucho que año a año puedas seguir disfrutando de esta prueba tanto como la primera vez! ya sabes que tienes toda mi admiración, muchos besos y ánimo!

Bella del Mar Cruz dijo...

La admiración la tienes tu por mi parte, aunque no te escriba mucho te leo y sigo por estos mundos. Gracias por todo.